Esta medida es alga contradictoria, ya que ha obligado a cerrar a las empresas durante quince días en marzo y otros quince días mínimo durante el mes de abril. Este cierre ha supuesto que las empresas no puedan facturar durante casi un mes o lo que es lo mismo, estén durante un mes sin obtener ingreso alguno.
Mientras el Gobierno las obliga a que tengan que pagar las cuotas a la Seguridad Social y nóminas de sus trabajadores durante los meses de marzo y abril, meses que el Gobierno no ha encuadrado los aplazamientos en el pago.
Caso similar sucede con los autónomos, a los que en el día de hoy se les ha pasado la cuota de autónomos, con sus negocios cerrados ya durante quince días y sin obtener ingreso alguno. Según la rueda de prensa de la Ministra Nadia Calviño, el Gobierno piensa devolver los diecisiete días que llevan con sus negocios cerrados de la cuota de autónomos, pero como siempre, no ha conseguido explicar la forma en que van a proceder a su devolución. Los autónomos a los que se les conceda la prestación extraordinaria por cese de actividad, les será devuelta la cuota de autónomos desde el día en que entró en vigor el estado de alarma.
Si verdaderamente se hubiera querido ayudar a los autónomos, no se hubiera esperado a que el Estado ingresara su cuota, sino que ya debería de haber estado publicado que sólo se les cobraría por los días que pudieron tener sus negocios abiertos.
